GRAN INCENDIO DE 1943

 








Cuando escribí sobre La Venta de Valverde a principio de 2020, dije que buscaría  información sobre el devastador incendio de agosto de 1943, que calcinó la cuarta parte de los edificios del pueblo, reduciendo a ceniza y escombro construcciones  bastante antiguas.

Ocurrió el 26 de agosto. Se estaban acabando las tareas de la siega. Había sido un mal año de cosechas como lo fueron los dos años anteriores, debido a las persistentes sequías,  y a pesar de las rogativas que se hicieron. Amaneció un buen día, y pasado el mediodía el viento regañón intenso favorecía  abeldar las últimas parvas. Viento que a la postre ayudó a  que la tragedia fuera mayor.

Pudiera ser hacia las tres de la tarde cuando mi abuela Felipa Gonzalo despertó de la siesta a gritos  a su esposo Cándido Pérez y a su hijo Toribio, porque  había incendio. Los mismos gritos  se dieron por todo el pueblo. Se entró en pánico colectivo. Las campanas tocaron a arrebato, alocadamente. Al ver la columna de humo se tocaron en Torreblacos, en Valdealvillo, y así por todos los pueblos del contorno. Humo que también vieron los que estaban regando las alubias en los Linares del Santo, como Felipa Pérez.

Los hombres, muchachos y muchachas mayores con celeridad pusieron camino de Blacos portando recipientes para coger agua.

Colaboró mucha gente  en la extinción del incendio. Se hicieron colas de personas hasta el rio para subir agua con calderos, cántaros, baldes, etc. Los hombres tiraron vigas de las casas para que el  fuego no fuera para el oeste.  Colaboraron los chavales de un campamento de la Falange que  estaban de paso en Calatañazor y  que supuso gran ayuda.

El ripio y la paja y el viento favoreció la expansión así como la cercanía de las casas. Se dice que hubo explosiones y se comentaba que podían de las armas que algunos excombatientes habían  traído de la guerra.

   



Los bomberos de Soria llegaron hacia las siete  de la tarde. Intentaron que no se extendiera el fuego y  alcanzara a más edificios y refrescar  los rescoldos.

Se sacó de las casas que lo que se pudo:  ajuar, mobiliario, documentos, y grano recién cosechado, y los animales  de los casillos .

Mi tía Lucia, que subió de Valdealvillo vio a su futuro esposo Toribio sentado sobre un saco de trigo  y repitiendo   "lo hemos perdido todo".

Se quemaron al menos once casas y otros tantos casillos. Eran construcciones muy pequeñas, de baja  calidad, pero centenarias. También  las maderas que tío Benito tenía amontonadas para la casa que estaba construyendo. 

Acabado el incendio cada uno fue donde pudo. Eran tiempos de solidaridad familiar y sus casas la primera acogida. Algunos tuvieron que habitar casillos provisionalmente.

Se les dio trigo y cebada que habían donado los vecinos de los pueblos de alrededor y que se guardaba en el Ayuntamiento. También mantas, ropa y matanza. 

Se planteó al general Yagüe la reconstrucción, pero desconocemos por qué no siguió  adelante. Se dice que los vecinos no llegaron a un acuerdo porque los que tenían casillos también querían casas. Eran tiempos de recursos muy escasos y si se hubiera hecho habrían pasado muchos años.

Diario Duero, 29 de agosto de 1943.
Texto lleno de la ideologia  y propaganda del "movimiento".

 




Mi padre se enteró cuando venía en tren, recién licenciado,  después de dos años  de guerra y    cuatro años de mili. Se enteró por  un veterinario que  estuvo destinado  en Rioseco y en Blacos, llamado D. Casimiro. Le preguntó de quien era hijo y le comunicó que su casa también había ardido. No quiero imaginar los sentimientos que le pasaron por la cabeza.

Después de 80 años no quedan testigos con memoria para entrar en detalles.  De este evento he oído  contar poco y parece que la memoria de la colectividad intenta olvidar este recuerdo traumático. 

Tengo entendido que si  hubo reproches por quien fuera el causante, pero  de nada servía lo  que no se podía probar y lo importante era superar aquella situación. 

Se dijo que si el fuego salió de un horno, que si los falangistas que estuvieron requisando borregos fumaban, etc.







Foto del Vuelo Fotogramétrico realizado por la Army Map Service Americano en 1956-1957
Se han empezado a realizar algunas construcciones en la zona oeste.




APOSTILLA   (FALTA POR COMPLETAR y CORREGIR) CON RESEÑAS

Personas que perdieron bienes con reseña. (Actualmente los propietarios de los solares son descendientes, nuevos propietarios por compra o cambio):

1. Ayuntamiento. Casa del maestro/a. Era una casa relativamente nueva. Esta casa según tengo entendido había sido de de Manuel Marín, abuelo de Felipa Pérez Marín, pero por permutas pertenecía entonces al Ayuntamiento. El Ayuntamiento tenía obligación de dar casa al maestro/a y su familia conforme a la ley de Instrucción Pública, llamada Ley Moyano. Habitaba la casa la maestra Carmen Acebes, con su madre. Carmen Acebes se casó con Ángel Martín, hijo de  Juan Martín (hijo de Juan Mata) y María Gonzalo Ropero (que también fue muchos años maestra de Blacos). Carmen y Ángel se fueron a Madrid donde el trabajaba en la Delegación de Hacienda

2. Donata Cubilla del Burgo. Hermana de Felipe Cubilla del Burgo. Vivía con la tía Sebastina que se casó con Ubaldo, padre del Crispín.

3. Cándido Escribano. Heemano de Saturnina , madre  de Cesar, y hermano de  Teodora, Flor, Urbano (que estuvo casado hasta su muerte con Natividad Pérez)

4.  Hilario Gonzalo Vinuesa ( padre del César)

5. Ladislao Galán Cercadillo. Vivía junto a casa de tio Benito. Era de Torreandaluz. No tenía hijos. Era carpintero, albañil, arreglaba aperos de labranza, ....

6. Nicanor Gonzalo Pérez. Casado con María Tejedor (hermana del padre de Avelino, Faustino Tejedor)
    Tengo entendido que ambos emigraron a Argentina. 9/1/1912. Vapor Gotha, en Villagarcía. ?

7. Daniel Gómez Pérez.  

8. Cándido Pérez Moreno. Nombrado en el texto. También emigró a América, animado por su hermana Tomasa. Volvió pronto si haber hecho fortuna, como tantos.

9. Florencio Cubilla del Amo. Era de Torreblacos, casada con Filomena Verde, hermana de Tío Evaristo. La cas donde está ahora la casa rural ?

10. Liberato Poza Antón. Padre de Ricardo Poza. Casado con Fausta Gonzalo.

11. Mariano García.

Quedan por determinar de quien eran los casillos.



 
                                                           Otro incendios

En el pueblo ya había habido otros incendios. El más cercano, la quema de la Venta de Valverde que ardió el 30 de septiembre de 1897 y salió la noticia en el Avisador Numantino( nº 1639). Cándido y su  familia tuvo que buscar cobijo en el pueblo, a una  casa que estaba donde ahora vive  Daría y que ardió en el incendio de 1943.

Hubo otro incendio en último tercio del siglo XIX , que no sabemos las casas afectadas, porque en el Boletín  Oficial de la Provincia de Soria del 19 febrero de 1875, nº 22, en la  Comisión de la Diputación, sesión del 28 de diciembre de 1974, se dice “ varios vecinos de Blacos piden rebaja d contribución territorial y empréstito, por la calamidad que han  "sufrido con el incendio de varias casas. Deducimos  que el incendio pudiera ser  en 1874 sin conocer la fecha.

La última fue el incendio de la casa de tía Cristina  y Sinesio. Creo que en los años sesenta. ?

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Blacos a 15 de diciembre de 2021

Serafín Pérez García

serafin.perez.2014@gmail.com