LOS CAMINOS DE BLACOS (3ª PARTE)


















LA NACIONAL 122: “CAMINO CARRETERO”


Debemos hacer un viaje al pasado, “no muy lejano”,  para entender este artículo. También pido paciencia para leerlo. Debemos retroceder 170 años, que es cuando se empieza a diseñar y construir la carretera.

A mediados del siglo XIX  se plantearon mejorar las comunicaciones, como motor de desarrollo, de Castilla con Aragón a través de Soria. La primera era la que se consideraba Agreda-Aranda, que en 1841 se habían hecho algunos tramos. También se planteó hacer la llamada la Soria-Palencia que después recibió el nombre  de Valladolid a Calatayud por Peñafiel y Soria. Aparte, cada tramo recibía un nombre, como pudiera ser Aranda-Soria. Eran de segunda categoría.

Hubo una ley que impulsó esta obra: la Ley Carreteras de 1851, la llamada ley Arteta. Esta ley  planteaba que las carreteras fueran  públicas, construidas y  mantenidas por el estado. No como anteriormente que eran mantenidas por los ayuntamientos.

El proyecto entre Aranda - Burgo de Osma  fue realizado por el ingeniero de caminos  Eduardo Saavedra, recién acabada la carrera en 1852 y se empezó  a construir en  1853.  La carretera no solo era de uso de vehículos, sino también de personas y caballerías. Eduardo Godino era el ingeniero jefe  de Obras Públicas de Soria, quien firmaba los contratos  y las expropiaciones.

Desde 1854 a 1856 se habían realizado tramos 1º 2º 3º 4º (en total 8,3 leguas). 
El tramo 5º era el que iba desde el término de Calatañazor al  Temerososo de Torreblacos, por el cerro los Caballos y atravesaba el camino de Torreblacos a Rioseco y bajaba por debajo de la Mercadera a Valdealvillo. Es el que afectaba a nuestro término.

Este tramo 5º fue modificado, realizando el trazado  por el actual Temeroso, bajando al Hoyo Colmenar, y de forma recta, atravesando parte de la Dehesa hasta la curva del Majano, y recto hasta el nuevo puente de Valdealvillo. Esto supuso retrasar la obra y hacer las expropiaciones.


trazado derogado del Temeroso de Torreblacos.

En 1856 las obras estaban paradas,  pero en 1860 la carretera estaba construida en su totalidad. 

Los 148 km  de esta carretera costaron  6.500.000 ptas. Estaban presupuestado en principio en 25.000 ptas.  por kilometro y 500 ptas. por kilómetro y año de mantenimiento.

La carretera se llamó de 2º orden y  en 1940 con el “Plan Peña” se le puso el nombre de Nacional.  Al principio pasaban vehículos de ruedas, carros, calesas, galeras, etc.  y por eso era un camino carretero.

Este camino carretero estaba hecho de macadam (en recuerdo del técnico escocés que lo ideó, McAdam). El macadam no tenía los cimientos, excepto en lugares poco firmes que se hacía con piedra gruesa. La última capa de piedra picada se aplanaba con rodillos tirados por bueyes y con pisones de mano, para que no quedaran baches, y finalmente se echaba recebo para compactar la piedra. La carretera era combada para evacuar el agua.

Imaginemos el polvo que se levantaba cuando pasaba un coche en los primeros años del siglo XX. 

Hacia 1910 se trajeron los primeros coches a Soria. A Blacos subían por la calle del Río y por una rampa que estaba debajo de la escuela nueva, antes de hacer el muro de contención. Pensemos que la cuesta del pueblo, estaba peor y para subir a la plaza, la Traspalomar, era muy estrecha. Ahora es ancha porque se cedió terreno para ampliar la calle.

En los años 30  se empezó a regar con asfalto algunos trozos. (al menos del km 175 al 179). Con la Guerra Civil esta actuación se paró. En los años 50 se asfaltó y entre 1962 y 1977 se cortaron los arboles, se ensanchó, se redefinieron las curvas, etc. En 1981 se estaban desmontando la primera y segunda curva del temeroso, de forma lenta,  y posteriormente se han hecho mejoras y  de todo tipo.

Es curioso lo que se cobraba  cuando se hizo la carretera por jornada, en reales: Peón mayor (5); peón menor (4);  mampostero (8,5);  cantero (13,5); carpintero (10,5) caballería mayor (8);  caballería menor (6)  carro con una caballería (16); carro con dos caballerías (20,66). Desconozco el poder adquisitivo, pero se trabajaba por la comida un poco más.

La dimensión de la carretera era 4 metros con paseo caminero de 1,25 m, 8 metros de deslinde desde el centro de la carretera. A partir de 1939, el ancho incluido andenes es por norma de 9 metros y se colocan los hitos kilométricos de piedra. Recordemos los del rasante que era  kilométrico y el del majano de que era miriámetro (Mi definición de  kilómetro: distancia del rasante al Majano).

La obra de albañilería como eran las alcantarillas, estaban hechas de sillarejo y mampostería basta. Para evitar los peligros, la alcantarilla con aletas de la dehesa, tenía lo que llamábamos boliches que técnicamente se llaman guardarruedas troncocónicos (muy fino esto para nosotros). En la primera curva del Temeroso todavía se conserva el murete- barbacana rematado con pretil de sillería o similar. Quiero recordar que en la segunda curva este murete tenía vanos para evacuar el agua, era un malecón. Y en el puente de Valdealvillo, murete de vanos, murete corrido y los boliches, antes de el estrechamiento de la carretera para ceñirse al puente. Los desniveles del temeroso debían  tener menos del 8% para facilitar la tracción animal.




Para hacer el tramo de Blacos hubo que hacer expropiaciones.  Con tasación, exposición  y la aceptación de los damnificados. Es curioso el proceso de cómo se hizo, y sobre todo que las expropiaciones indican la  propiedad  de la tierra antes de las desamortizaciones y quiénes eran los administradores o propietarios de las fincas.

En Valdealvillo para hacer la carretera, hubo que expropiar varias viviendas, una fragua y algún corral. El puente se hizo sustituyendo el anterior de madera, cambiándolo por otro de  piedra, que era muy bonito. Ahora tapado con hormigón por el ensanche. Es claro que el pueblo quedó modificado a peor, como hoy lo podemos observar.

En Valdealvillo, Villaciervos y Soria había portazgo: había que pagar por pasar. Digamos que ya teníamos carretera de pago desde 14 de agosto de 1860, y no sé  hasta cuando duró este copago. Los derechos de arancel salían publicados en la Gaceta de Madrid para el arriendo en pública subasta.  Los portazgos se hacían sobre mercancías y comercio y se vinculaba con el arreglo de una parte del camino.

Se cuentan anécdotas de cómo la gente evitaba el pago del portazgo: se decía que  iban a Soria por Valdenebro, Boos, Rioseco….. También se cuenta la anécdota de unos de la Torre que se ahogaron con su yunta por vadear. Pero de esto hay poca certeza. De lo que si hay certeza es que desde mitad del siglo XVI se pagaba pontazgo, y que este pudo ser  de las monjas clarisas, suponemos que por cesión de derechos..

Supongo que han pasado todo tipo de personas a pie o en carros, en automóviles, etc. También pasaban las postas, que se hacían relevo de caballos apostados cada 15 o 20 km.

Por aquí han pasado bandoleros, salteadores de caminos, desertores, guerrilleros, etc. Supongo que hay miles de anécdotas que entre todos podríamos contar. Mi madre, con apenas diez años , recuerda de la Guerra Civil a los italianos  que iban en camiones grises, armando barullo, mal vestidos y tirando todo por el suelo; los alemanes ,en camiones verdes, bien vestidos, compraban en casa  de la Trini, no tiraban las latas al suelo y eran muy educados.

La realización de la carretera supuso ayudar a que la economía y la vida de los ciudadanos mejorase. Blacos al fin de cuentas quedaba cerca de la carretera, por donde pasaba desde 1926 coche de línea a Soria, al Burgo; el de Fuentepinilla (que venía por la Venta Nueva, que llevaba en la baca cochinos al Burgo,  portaban hasta latas de petróleo, y mil cosas más,....)

EL ARBOLADO DE LA CARRETERA

Desde principios  del siglo XIX  se daban instrucciones a los municipios para que plantasen arbolado para  su aprovechamiento de madera, de hoja de mora, o para reforestar. Se imitaba  lo que se hacía en Francia. Por poner un ejemplo, cuando estuvieron acuarteladas las tropas de Napoleón en  Burgos se dedicaban a plantar árboles en las carreteras, pues no entendían que hubiera tan pocos árboles.

En 1862 se empezaron a plantar árboles  en las cercanías de los pueblos y en algunos tramos de carretera. Hacia 1900 se empiezan a plantar árboles en las carreteras debido al Decreto de 6 julio de 1900. Se hacía para embellecer,  orientar a los coches y dar sombra. 

Los recuerdo casi como se puede ver en la fotografía, con un trozo de tronco encalado. Cuando éramos pequeños íbamos a Valdealvillo por San Antonio, bajábamos con mi madre, que es de Valdealvillo, y para hacer los cuatro kilometos nos decía: “ahora hasta aquel árbol” y así nos motivaba para caminar. Era de agradecer la sombra en verano.

Los arboles se plantaron desde el principio, por tandas,  que se traían de viveros que se habían creado para este menester. Eran en su mayoría chopos, olmos, castaños de indias, acacias, tilos, etc.

Los  árboles se arrancaron a partir 1961, para ensanchar la carretera y porque se consideraban peligrosos, pues los coches se estrellaban contra ellos con muchas muertes. Nosotros lo lamentamos pues nuestra madres nos mandaba a coger hojas de olmo para los cerdos, que por cierto les encantaba.


hacia 1946, de la fototeca IGN


Esas filas rectas de árboles no fue del agrado de los agricultores, que no los veían ni bonitos, ni útiles y daban sombra a los sembrados y quitaban sustancia a la tierra.

Según el Noticiero de Soria, En 1906 varios vecinos de Torreblacos y Blacos son denunciados por descorchar cientos de chopos de la carretera (en Blacos 272). Dice el Noticiero  que Alfonso XIII, en el mes de julio pasó y fue testigo. En la carretera  de la Vega del Abión se dice que se descorcharon 1500 chopos.

Benigno Vinuesa Ropero (casualmente con apellidos comunes de Blacos), de Navalcaballo escribía el  22/9/1906 en el Avisador Numantino (revista semanal de intereses morales y materiales de la provincia de Soria) lo siguiente:

“…. mientras en algunos lugares se celebraba la fiesta del árbol aquí se destruían, no apreciando el bien general sobre el particular. (…)  “desde la cuesta del Temeroso, término de Blacos, hasta  el  Burgo de Osma hay una extensa vega de unos veinte kilómetros de longitud, recorrida por dicha carretera, cuyos márgenes es tan poblados de arbolado, casi todos de la especie chopo, que, con sus raíces y sombra, han  inutilizado más de trescientas fanegas de labranza, bastantes de las cuales destinadas al cultivo de hortalizas, patatas alubias o judías”

También se quejaban los de la vega  de que el río que estaba mal encauzado, se desbordaba,  y que junto a lo anterior, tenían inutilizadas la tercera parte de la vega del Avión. Todos los pueblos de la vega habían pedido a las autoridades, durante los diez últimos años la corta de los arboles, arranque o sustitución por otros menos perjudiciales. Se pedía que se sustituyeran por acacias, plátanos, etc. que perjudicaban menos.  También que los controlases los ayuntamientos y se enseñara en las escuela a apreciar los beneficios de los arboles,….

Se decía que en Blacos, Torreblacos y Torralba era donde más se habían destrozado (en Valdealvillo  apenas se nombra y esto puede decirse porque allí se había recientemente asentado la benemérita).

EL MANTENIMIENTO: LOS CAMINEROS

La vigilancia  y el mantenimiento de la carretera era de losa camineros. Tenían asignado un tramo. Actuaban en cuadrillas o en solitario. También se les encomendaba la vigilancia de las comunicaciones como los tendidos del telégrafo.

El caminero debía vivir en el sector de mantenimiento. Se llamaba la casilla de peones. Se solía colocar en zonas elevadas par facilitar la vigilancia. Se evitaba que pasaran carruajes de tiro con clavos en las ruedas que destrozaban la calzada.

Los camineros tenían la obligación de vigilar la carretera, pero también la Guardia Civil. La carretera influyó  para que la Guardia Civil se trasladase  de Calatañazor a Valdealvillo. El traslado de puesto, según indica el Noticiero de Soria se hizo el 21 de julio de 1909. Se traladaron un cabo y 4  guardias (ya entonces se quejaba e de que se concentrases en los pueblos los cuarteles, dejando muchos pueblos sin guardia civil.

La guardia civil de trafico denunciaba a ganaderos que pastaban en las cunetas, a los carros sin chapa de arbitrio de la diputación, carros sin  farol por la noche, bicis sin timbre y dinamo y faro, etc… Esto da para otro tema y mil anécdotas, algunas desagradables. De todas formas no faltaba educación vial, tan simple como era por donde se podía circular. Recuerdo un libro amarillo de como er buen peatón que me regaló Teogenes Ortego Frías,pariente de mi abuela (que fue inspector de enseñanza y miembro de la Real Academia de la Historia).

OTROS ASUNTOS:

Recomiendo que leáis los argumentos que se daban de acompañar a la carretera con un ferrocarril, que podría haber tenido estación de tren en Blacos.

Libro “Ferrocarriles de la provincia de Soria. Memoria 1880. Está digitalizado en la Biblioteca CYL. No tiene desperdicio.  El informe del plan de ferrocarriles de España sopesaba pasar la vía del Burgo a Soria por la vega del Avión. 1865.


Pinto a 15 de marzo de 2020
Serafín Pérez García
Serafin.perez.2014@gmail.com




LOS CAMINOS DE BLACOS : 2ª PARTE
















        LA CALZADA ROMANA: “UN CAMINO NADA IMPORTANTE”


La calzada romana, o la calzadilla, como la llamaban algunos, no se valoraba suficientemente  lo que en realidad era una gran obra pública. Atraviesa el término por extremo sureste. A las tierras contiguas y hasta el término de Rioseco se llaman las Calzadas. Por encima de los páramos de Calatañazor recibe el nombre de camino sarraceno, camino carramoros: supongo en recuerdo de cuando éramos árabes.

La existencia de la antigua vía romana entre Uxama y Augustobriga  se conocía desde el siglo XVI gracias al cronista  aragonés Jerónimo Zurita.Se trata de la vía XXVII del "Itinerario de Antonino".


 “Memoria de la Real Academia de la Historia, volumen 9, 1879.

Quien  mejor la estudió fue Eduardo Saavedra, que  en los años sesenta del siglo XVIII fue  delegado de Obras Públicas de Soria.  La estudió cuando  trabajaba para la empresa de Ferrocarriles del Suroeste,  buscando las posibilidades de proyectar un trazado de tren entre el Burgo y Soria, que pasaba por la Vega del Abión.

Se trata de una  vía de 107 km entre Agustobriga (Muro de Agreda) y Uxama (Osma), construida o reparada por Trajano en los primeros años del siglo II d C. 



En  nuestro término hemos visto como estaba construida  gracias a las catas que  hizo un equipo de investigación de la Junta de Castilla y León, antes de que los desmontes de la  autovía destrozara un trozo.



Está formada por tres capas: una de  piedras gruesas que hacen de cimiento, otra  de piedra machacada  y  la última de recebo calcáreo. Todo encajado con dos hileras de piedras grandes que hacían de márgenes y que estaban ocultas. La  superficie es curvada para evacuar el agua.


Sección de la calzada: milla LVI (En Blacos)

Saavedra dice que desde la milla LVI (la parte de calzada que está en el término) hay un  camino que baja, por la ermita, que pasa  Blacos,que llega hasta lo que llama las Fuentes del Abión, (donde está ahora el refugio) , donde podría estar la ciudad de Veluca.

(Recordar que el historiador  romano Cornide  atribuye estas ruinas de Veluca  á la Savia que describe Ptolemeo).  Para Saavedra,  la ciudd de Savia pudiera ser Las Cuevas y no este lugar de Blacos. A saber.

Saavedra  dice que estas ruinas, de las que apenas quedaba nada, podría tratarse de una villa romana o un  monasterio posterior, del que parte un camino empedrado de un metro  de ancho que llega hasta las eras de Blacos.

A mi entender la bajada por la ermita, pudiera ser un camino romano, pero también creo que es romana la bajada del camino de Rioseco, donde todavía queda camino empedrado  y que se conserva,  parte por dentro de la dehesa y parte por fuera. 

Recordar no confundir Veluca con Voluce. 

Se desconoce la localización de  la ciudad celtiberica de Voluce. Que Voluce fuera el actual Blacos es defendido por algunos autores. Otros afirman que está en el cerro  de  Los Castejones, en Calatañazor; pero este lugar  podría ser un castellum o un hospitium , ya que es  demasiado pequeño para ser ciudad,  está en mal lugar, y no hay agua. Que no haya demasiadas ruinas ni en -Blacos ni en los Castejones se debe que los edificios se hacían de madera y han desaparecido.

Como veis, todo suposiciones, pero queda claro que este territorio fue importante,  territorio de los Velos o pelendones. (Otros dicen que éramos arévacos, como los numantinos). Tenemos a tres kilómetros  la necrópolis celtibérica del siglo -IV de la Mercadera, con 99 enterramientos encontrados con sus ajuares funerarios.

Esta vía se utilizó como camino militar por los romanos, recordando que se hizo dos siglos y medio después de la rendición de Numancia. Por supuesto que la obra se hizo con esclavos, aportados por los magnates que tenían intereses por la zona, pues había muchas granjas cercanas a la vía, y con aporte monetario de estos, que también contribuían a su mantenimiento.

Por esta vía pasaron invasores godos, y algunos se          asentaron o asimilaron con los hispanorromanos: no sabemos en qué condiciones.


Fue vía militar de paso para las huestes musulmanas, que como sabemos se  aprovisionaban de los poblados cercanos a la calzada. Estos no solían respetar las construcciones de los infieles, por lo que supones que se destruyeron construcciones visigodas de tipo religioso. Esta zona fue paso del Duero hacia la Rioja donde los moros estaban bien asentados.


Tras la repoblación medieval, por esta vía pasaron militares, curas, comerciantes,... con caballos y cuando se pudo con carros. Fue camino  ganadero coincidente en muchos tramos con la Cañada Real de Soriana, que  empezaba a pocos kilómetros de Blacos.


Enrique Flórez, historiador eclesiástico fue del Burgo de Osma a Soria en 1766, se dirigió por Lodares, Boos, y Rioseco, dando un rodeo para no pasar por esta vía. Suponemos que lo hizo porque la calzada  estaba intransitable.


En la ”Guía par ir de unas ciudades a otras” de Matías Escribano (1767), el camino de   Valladolid a Soria, figuraba  que pasaba por Burgo de Osma - Velasco - Valdealvillo -  Blacos- La Mallona,… Se describe como camino de herradura y no de ruedas, como se denominaba a las vías  por donde pasaban carruajes. ¡Como estaría el camino viejo, que así ya se llamaba!

En 1771 Tomás López (cartógrafo de Carlos III) encarga al cura de la Villa, Ramón Bary Martínez, que le describa el arciprestazgo de Calatañazor; y en la descripción indica que el camino viejo está  intransitable.

Por esta calzada vino en abril  de 1778 el  corregidor de Soria,  para hacer efectiva  que el alcalde de Blacos, Pedro Sancho,  tomara posesión, en representación del concejo, del monte Carrascal usurpado por el  concejo de Calatañazor.  (Leed para más información “La Media y el Carrascal” de este blog)


En 1812 la carretera del Burgo a Soria, que era esta vía, era para caballerías (de herradura) y no figuraba en los mapas de los caminos de ruedas de Santiago López. Posiblemente fuera carretera  de tercer orden y por supuesto, en estado calamitoso. 

Por esta carretera  pasó el general Ney y el general Dessoyes, desde el Burgo a Soria el 21 de noviembre de 1808, en la invasión de Napoleón. Y de Soria al Burgo regresó el coronel Douvernet. Seguro que este camino era el itinerario más corto. 

 En los itinerarios de 1838 era considerado  camino para  caballerías. 

 A principios de siglo XIX era competencia el mantenimiento  de estos caminos, en el  tramo que les correspondiese, a los  ayuntamientos. 

Existía un reglamento en 1848 por el cual los municipios debían arreglar los caminos vecinales con cuadrillas por el sistema  de “prestación personal”, gratuito, dos veces al año, 6 días en total.

Alfonso X , quinientos años antes , ya legisló  en “Las Partidas” la conservación y  cómo respetar el  espacio de los caminos, indicando que no se podían estrechar ni construir en ellos. (Cosa que se todavía incumplimos)

En los planos  del termino municipal de 1915, que se puede consultar en en el  Servicio Geográfico Nacional,  figura como camino real viejo, pero es una   confusión por coincidir en parte con la Cañada Real. No es camino real ya que no  partía de la Corte.



A partir de los años 70 la calzada fue transitada por los tractores, que marcaron  cicatrices paralelas, no resistiendo para  lo que no estaba preparada.Y para colmo,  las  obras de la autovía: con  tanto  proyecto, impacto ambiental, etc.  se han cargado un  kilómetro de calzada de nuestro patrimonio. Simplemente hubiera bastado un minitunel y haber desplazado cien metros el trazado para haberla salvado.

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 La gente no  consideraba  a este camino por la zona de Blacos importante pues era poco utilizado por los lugareños.  Se utilizaba la calzada, el Camino Viejo, bien por debajo de la Mercadera, por Valdealavillo, o  bien por Torreblacos, hasta la Cruz del Canto de Valdealvillo  (hito que fue muy  importante) para llegar al Burgo.

El camino, en la bajada del Temeroso de Torreblacos, se vigilaba desde  este pueblo por una torre y que sirvió antes y después de la repoblación para vigilar el territorio y hacer de pósito.

  Sí. Fue importante durante muchos siglos.

El tiempo borró las huellas y los caminantes se perdían cuando se perdía el camino y no  encontraban sitio para alojarse por encontrarse los pueblos a partir del Temeroso   alejados de la vía. Ojalá que nosotros no perdamos la  memoria.


   


Pinto a 11 de marzo de 2020

Serafin Pérez García

serafin.perez.2014@gmail.com

LOS CAMINOS DE BLACOS (1ª PARTE)












LOS CAMINOS DE BLACOS


                            1ª PARTE: INTRODUCCIÓN E INTENCIONES 

                            2ª PARTE: LA CALZADA  : "CAMINO POCO IMPORTANTE"

                            3ª PARTE: LA N-122, "CAMINO CARRETERO"
                             
                            4ª PARTE:  "CERCANÍAS Y LEJANÍAS"

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INTENCIONES

Reconozco  que lo que vais a leer es un trabajo incompleto, pero quiero que sea  abierto, para que otras personas aporten nuevos datos,  y entre todos lo hagamos completo. 


Pretendo ofrecer  los datos que  conozco, que he obtenido de diversas fuentes, y los que sois cercanos al pueblo también los conozcáis.

No pretendo que sea un trabajo de geografía, ni  de etnología, ni de historia. Simplemente ofertar datos y que queden ahí.

He intentado huir de las anécdotas (que conozco algunas),  de mis vivencias, y ser lo más objetivo posible, pero no lo he conseguido. 

A lo largo del trabajo he pensado mucho en todas las personas que durante siglos han recorrido estas tierras del alma, personas que han recorrido caminos de polvo y barro, de frío y de calor, de hambre, sed y enfermedad, calzados y descalzos, a pie o en animal, yendo a los los lugares y muchas veces a ninguna parte.

Hoy vamos demasiado rápidos (no sé a dónde), prisas que eran menores para nuestros ascendientes. Personas que respiraban despacio y seguramente sentían que la tierra y ellos eran lo mismo.

Yo me siento parte de estas “tierras del alma”  y de esta comunidad, y contemplo con sentimiento el vacío que se nos ha creado.

Quiero recordar que este territorio tiene historia, compartida con otros lugares,  historia que no se ha escrito más que en el aire. Nosotros podemos dejarlo para otras personas





                                                                 
                    1. INTRODUCCIÓN 

Reconozco  que lo que vais a leer es un trabajo incompleto, pero quiero que sea  abierto, para que otras personas aporten nuevos datos,  y entre todos lo hagamos completo.

Pretendo ofrecer  los datos que  conozco, que he obtenido de diversas fuentes, y los que sois cercanos al pueblo también los conozcáis.


No pretendo que sea un trabajo de geografía, ni  de etnología, ni de historia. Simplemente ofertar datos y que queden ahí.


He intentado huir de las anécdotas (que conozco algunas),  de mis vivencias, y ser lo más objetivo posible, pero no lo he conseguido.

A lo largo del trabajo he pensado mucho en todas las personas que durante siglos han recorrido estas tierras del alma, personas que han recorrido caminos de polvo y barro, de frío y de calor, de hambre, sed y enfermedad, calzados y descalzos, a pie o en animal, yendo a los los lugares y muchas veces a ninguna parte.


Hoy vamos demasiado rápidos (no sé a dónde), prisas que eran menores para nuestros ascendientes. Personas que respiraban despacio y seguramente sentían que la tierra y ellos eran lo mismo.

Yo me siento parte de estas “tierras del alma”  y de esta comunidad, y contemplo con sentimiento el vacío que se nos ha creado.


Quiero recordar que este territorio tiene historia, compartida con otros lugares,  historia que no se ha escrito más que en el aire. Nosotros podemos dejarlo para otras personas

Durante siglos la economía de esta comarca ha sido  de supervivencia.


No había producción para comercializar: solo para  la subsistencia.

La  gente no solía salir del pueblo. Como mucho podía ir a los mercados  cercanos. También solían desplazarse los hombres a por ganados. Se usaban  los  caminos  de  herradura de pueblo a pueblo, las cañadas y los cordeles.


Los primeros caminos fueron aquellos que trazaron las tribus celtibéricas,  para   mover sus ganados, caminos temporales, que duraban lo que duraba  el asentamiento.


Con la conquista romana y para facilitar los movimientos militares  se    construye  la calzada romana,  y los caminos que comunicaban las granjas  dispersas por toda la vega del Abión.


Con la romanización las personas se fijaron al territorio para el servicio de  los  magnates. Solo los que la economía necesitaba se movían. Así continuo   con los  nuevos colonos godos. La gente, en general, no se  podía mover,                        estaban fijados  al  territorio. Después con las invasiones musulmanas  se  desplazó la población hacia el norte. .


Los caminos que se perdieron por la escasa población hasta  el siglo XI, cuando  se repuebla, y se hacen los caminos radiales para  comunicarse  con  otras aldeas,  con los adelantamientos y las tierras más  lejanas.


Es preciso destacar que hay  caminos que solo los utilizaban personas de  otros pueblos, que pasaban por el término.


Es a partir de mitad del siglo XIX cuando se construye la carretera del Burgo  a  Soria, que la atraviesa el término por la parte más estrecha, y no se harán  nuevos caminos hasta la concentración parcelaria de 1964, preparados para  que se  moviera la maquinaria.

Pon nuestro  caminos han pasado todo tipo de personas: reyes, ejércitos , partidas, guerrilleros, obispos, magistrados, cobradores de arbitrios, .... Por estos caminos se han traído las noticias del mundo muchos años después que ocurrieran.

Los caminos actuales están magníficos, las senderos antiguos desdibujados, las coladas y cañadas, señalados solo en los mapas.  El pesar mío y de  muchos es que hoy pasa por ellos menos gente.

Pinto a 9 de marzo de 2020

Serafin Pérez García

serafin.perez.2014@gmail.com